EL TEATRO EN EL "SIGLO DE ORO"


En el Siglo de Oro español existían tres tipos de teatros:

El teatro público – Las representaciones se hacían en un patio rectangular llamado “corral”, flanqueado por los muros traseros de las casas vecinas. En él se ubicaban los hombres, de pie, a quienes se llamaba “mosqueteros”. Los balcones y ventanas se reservaban para los espectadores distinguidos, y las mujeres se situaban en una galería independiente denominada “cazuela”. Detrás del patio había asientos formando un anfiteatro y a lo largo de  los muros también se colocaban bancos o gradas. Las funciones eran de tarde y terminaban una hora antes de la puesta del sol; se realizaban si el tiempo lo permitía, pues el patio era descubierto. El escenario estaba constituido por un simple tablado cerrado al fondo y los costados por telones pintados. De modo que el poeta debía crear el ambiente con el texto.




El teatro eclesiástico – Era el destinado a las representaciones de los autos sacramentales. Estas se hacían sobre carros móviles, mucho más ricos en recursos escenográficos que los del humilde teatro público.

El teatro de Corte – Igualmente estaba bien provisto desde el punto de vista escénico. Podía levantarse en un parque o en una sala especial del palacio. Las representaciones tenían lugar en oportunidad de las fiestas reales.